Un país en tu mochila

lunes, octubre 16, 2006

Elecciones en Catalunya.


Las elecciones están a la vuelta de la esquina y la precampaña y las disputas ya han florecido. Lo normal es que la disputa política sea limpia porque de lo contrario solo participarán en las elecciones camorristas.

Es muy mal síntoma que la precampaña catalana haya sido un laboratorio de ensayos de agresiones físicas a dirigentes del PP y de propaganda negativa emitida en vídeos, cuyo costo desproporcionado indica que CiU está dispuesta a casi todo por intentar recuperar el gobierno de la Generalitat.

Más preocupante aún es observar que la violencia verbal y física no está solo presente en las campañas electorales sino que está instalada en la vida cotidiana. El terreno está abonado para que cuando llegue la recta final, en forma de elección, se incrementen unas pasiones que ya estaban presentes.

Condenar los casos concretos en que se sobrepasan las normas de fair play electoral no debe eximir el análisis meticuloso de quien practica la violencia cotidianamente sobre las instituciones democráticas, sembrando acusaciones y sospechas de la realidad de nuestro estado de derecho.

Todavía estamos a tiempo de reconducir la política y el periodismo a los parámetros racionales donde la discrepancia profunda, el contraste de las ideas, las propuestas y las denuncias de los hechos incorrectos no contengan los tintes barriobajeros y vulgares a los que desgraciadamente nos estamos acostumbrando. En este escenario que se está montando, la interacción de algunos medios de comunicación con dirigentes políticos sin escrúpulos, promueve vectores en los que parece que todo vale porque nadie va a pagar por sus excesos. Resulta especialmente alarmante que una coalición como CiU, que ha tenido tradicionalmente la mesura y la corrección como forma de comportarse en la vida política, haya caído en la tentación de hacer un vídeo tan denostable como el que ha editado.
Ahora que comienza la campaña, es un buen momento para que todos los participantes recapaciten, den ejemplo de civismo y democracia y para conseguir que el objetivo de una gran participación sea posible.