Un país en tu mochila

martes, junio 20, 2006

Raúl vuelve a tirar del carro

España ya está en octavos de final y sigue dando de que hablar en el Mundial . La selección, al compás de Xabi Alonso y activada en la segunda parte gracias a la entrada de Cesc y Raúl, remontaron ante Túnez y se clasifica para octavos de final.

Ayer, en el Gottlieb-Daimler Stadion de Sttutgart, bajo una fina lluvia, la selección de Luis Aragonés superó una prueba dura ante Túnez, que se adelantó en el marcador y se fajó todo lo que pudo, con ahínco cartaginés, hasta que tuvo que rendirse a la evidencia de la superioridad de su rival. Superioridad que llegó en la segunda parte y desde el banquillo, con la aparición de Cesc, , el juvenil de esta selección joven y dinámica.


A pesar de que el 3-1 pueda indicar lo contrario, la victoria obligó a España a exprimirse y picar mucha piedra. Se le atragantó el partido a poco de comenzar y algo tuvo que ver en ello Roger Lemerre, que optó por la única táctica posible para detener a esta España del 'jogo bonito': colapsar el centro del campo, el epicentro creativo del equipo de Luis Aragonés, el lugar a partir del cual su juego de toque cobra sentido y sensibilidad.

Era un embudo en toda regla que se hizo más compacto a raíz del gol de Mnari en el minuto 7, tras un error en cadena de la defensa española, especialmente de Puyol, el chico que tuvo el día tonto.

En concreto Raúl y, sobre todo, de Cesc Fábregas, fueron el revulsivo de la selección. El chaval del Arsenal lo tiene todo: dinamismo, toque, sentido de la pausa y verticalidad. Con él en el campo, España dio otro nivel y de sus botas nacieron los dos goles que sirvieron para remontar. El primero fue obra de Raúl, que puede estar contrariado y bajo de forma, pero que hasta con muletas sabrá estar donde tiene que estar dentro de las áreas de un campo de fútbol. Sufrimos, pero podemos empezar a soñar.